Por Cristina Cuesta Lerín
Cohousing (covivienda, o vivienda colaborativa) es una definición global para una forma de vivir apoyados y socialmente activos en comunidades intencionales auto-gestionadas.
Esto implica obtener grandes beneficios, pero también compartir trabajo, responsabilidad y compromisos. No todos los mayores estarán interesados en ser parte activa del proceso de crear una comunidad cohousing, vivir como parte de un grupo ó con otra gente mayor. Muchos preferirían no reconocer la realidad del envejecimiento y la dependencia, que tiene un modo sigiloso y rápido de acercarse, y muchos estarán poco dispuestos a salir de su casa hasta no verse forzados por una crisis.
Hay un descontento por la gama limitada de opciones para las personas mayores, y por la percepción pública de la necesidad de proveer de alojamientos especializados de cuidados y bienestar, acompañados a menudo por altas dosis de edadismo y paternalismo, en lugar de facilitar la elección entre diferentes opciones de modo de vivir y de recibir los cuidados, que contribuya a que los mayores sean felices y se sientan estimulados.
Sin embargo, la soledad es endémica y preocupante, y genera una enorme demanda sobre la salud y los cuidados. Esto implica una necesidad apremiante de incrementar las acciones preventivas con planificación y participación de sus usuarios potenciales, de forma que construya capacidades y fomente el crecimiento orgánico de un sentido de comunidad a la vez que se desarrollan o adecúan los entornos, edificios y servicios necesarios.